Una vez más aterricé con mis talleres en Vitoria-Gasteiz, una ciudad en la que tengo muy buenos amigos, así como un buen puñado de fotógrafos entusiastas alrededor con los que pude realizar un taller muy divertido y variado, con un día de sol espectacular y una noche con luces diferentes. Realizar uno de mis Talleres de Inmersión en Fotografía de Calle con estos mimbres ya presagiaba un gran día de fotos.






Pese a que las temperaturas en esta época invernal no eran muy altas, el sol nos acompañó durante todo el sábado. Esto hizo que tuviéramos la posibilidad de componer y organizar nuestras fotos de una forma más rica en cuanto a jugar con las altas luces y las sombras de manera






Vitoria es una ciudad llena de arte urbano y de vida en sus calles, con un casco viejo muy interesante, que merece la pena recorrer con o sin cámara, pero que al llevarla en la mano, siempre tienes la posibilidad de disponer de oportunidades fantásticas para contar sus historias de un modo diferente.






Y es que la comprensión de cómo funciona la luz en sus distintos estados, la precisión de levantar tu cámara en el momento preciso y buscar con ello una composición que apoye la idea que tenías en la cabeza, son puntos fundamentales de mis talleres. Intento ayudar a que técnicamente la cámara nunca suponga un problema y que todos los asistentes consigan olvidarse de ella, siendo una extensión de su mirada.






El año ha comenzado muy interesante, con el segundo taller en tierras vascas, tras el taller de enero en Bilbao, en julio regresaré a realizar una nueva Inmersión en Fotografía de Calle en San Sebastián, así que os animo a acercaros y a compartir la calle conmigo y el resto de fotógrafos que me acompañen. Seguro será un nuevo y fantástico día de fotografía




Todas las fotografías de este artículo se tomaron con una Fujifilm X-T3 y mi querido y fiel Fujinon 23mm f2 WR.