Una de las ciudades que tiene más encanto a la hora de fotografiar en la calle es Sevilla. Siempre disfruto de grupos espectaculares con mucho talento y ganas de aprender nuevos puntos de vista o formas de hacer las cosas. Por ello, siempre que se acerca la hora de viajar a Sevilla la espero con ansias. En esta ocasión, no ha sido diferente, y hemos podido pasar un fin de semana de inmersión en la fotografía de calle muy interesante y divertido.





El buen clima y la luz del sol facilitó la composición fotográfica y nos permitió trabajar la luz de una forma más agradable. Lo más chulo de los talleres de dos días es que nos permite trabajar con todos los tipos de luz, desde los atardeceres, las últimas luces del día, la luz artificial de la ciudad de noche y, en este caso ya el domingo, trabajar con grandes contrastes.









Sevilla es una ciudad llena de posibilidades fotográficas, tanto para los amantes de la fotografía de calle, como para cualquier otra disciplina, y casi en cualquier barrio te encuentras rincones con potencial fotográfico.






Que Sevilla tiene un color especial, como dice la canción, es una gran verdad a la hora de explotar este aspecto fotográfico. El trabajo con el color nunca es sencillo, y como siempre advierto, lo importante es buscar que funcione directamente en la toma fotográfica. Sin embargo, los colores clásicos de las calles y edificios de Sevilla te facilitan mucho este tarea.








Si tienes la oportunidad, no te pierdas el siguiente Taller que haremos en Sevilla. Mantente atento apuntándote a mi lista de correos.
Todas las fotografía fueron tomadas con una Fujifilm X-T2 junto a Fujinon xf 23mm f2 y xf 35mm f1.4