El último taller de Inmersión en Fotografia de Calle que realizo en la ciudad de Sevilla fue una oda a la batalla contra los elementos, por supuesto me refiero a los climatológicos. La predicción a mitad de semana era de lluvias intensas todo el fin de semana. Sin embargo, una vez más, la suerte siempre me acompaña y aunque tuvimos algo de lluvia durante un rato el sábado por la tarde, pudimos disfrutar de buen tiempo e incluso de un domingo de sol intenso con el que desarrollamos un taller espectacular.
Si quieres apuntarte a los próximos talleres de fotografia visita el calendario de web y estate atento a la newsletter.
A mí personalmente que llueva no me molesta en absoluto, de hecho es un entorno que te permite realizar fotos diferentes, con un ambiente especial y con elementos nuevos con los que componer. Como además nos íbamos hacia la noche, ya que el sábado comienzo a las 16:00h, que hubiera más o menos luz del sol casi era anecdótico.
Aprovechamos a realizar esas fotos que no siempre podemos obtener, y a disfrutar de la ciudad de un modo distinto y emocionante. Cuando la lluvia llegó, pudimos revelar, explicar el flujo de trabajo y ver y estudiar fotos con mi portátil alrededor de un café. Así que, como os imaginaréis, disfrutamos un montón y aprovechamos de ver la tarde de fotografía.
La noche cayó y el ambiente húmedo y lleno de textura por el centro de Sevilla, nos permitió jugar con otros elementos y con una luz artificial que siempre es sugerente para conseguir fotos interesantes. Un sábado intenso y divertido.
El domingo llego y como digo, el sol apareció limpiando el cielo y colocándomelas un azul imponente en las calles sevillanas. A partir de ahí arrancó un taller totalmente distinto. Con el sol potente en el cielo, la luz se tornó en dura e intensa. Trabajamos con otros elementos y en otros lugares. Nos dirigimos hacia otra parte de la ciudad y así encontramos escenarios distintos para trabajar.
El grupo fue estupendo y lo cerramos con una cerveza en una terraza sevillana, tras haber fotografiado en los últimos momentos del taller en las Setas. Un fin de semana interesante, emocionante y divertido. Compartido con personas tan simpáticas y tan dispuestas a aprender es una gozada. Volveré.
Todas las fotos que os muestro fueron tomadas con una Fujifilm X-T3 junto a un Fujinon 23mm f2 WR
Rober Tomás 