Como cada año que comienza, el primer taller marca mucho el punto de arranque de todo el año. Este 2023 no ha podido comenzar mejor, ya que el Taller de Inmersión en Fotografía de Calle que realicé este sábado en Bilbao fue, a todas luces, espectacular.
Acompañado por un grupo de ocho fotógrafos con muchas ganas de aprender y de exprimir al máximo su creatividad en la ciudad, recorrimos las calles de una de mis ciudades preferidas en España, Bilbao.






Tuvimos un día muy interesante en cuanto a luz, ya que comenzamos la mañana con un sol precioso que nos regaló diferentes escenas interesantes mezclado la luz, cada vez más dura, con luces distintas que nos empeñamos en buscar dentro de la ciudad. Por suerte, Bilbao tiene un mezcla de ambientes muy interesantes que te hacen pasar de la modernidad más radiante a lo añejo con encanto.






La mañana literalmente voló y en seguida nos vimos comiendo juntos y disfrutando de otro de los alicientes de los talleres fotográficos, la charla que hacemos al mediodía. Un momento para explicar y resolver dudas sobre el flujo de trabajo, sobre temas técnicos, éticos, estéticos,… Momentos en donde no faltan las risas y las anécdotas de cada uno. Un momento interesante de descanso que sirve para recuperar energías y así afrontar la tarde con fuerzas.






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La tarde tuvo un poco de todo, porque el sol dejó paso a un día más encapotado en donde nos encontramos con otra forma de componer, pensando no solo en lo que sucedía en la luz, sino ahora también buscando lo que ocurría en las sombras. Así, cambiando de escenarios, nos dirigimos a rincones diferentes de Bilbao, para esperar al último tramo del taller, el anochecer.




Y es que en estas fechas del año, la última parte del taller siempre termina en la noche. Así pues, tuvimos que cambiar de registro para tener un punto de vista diferente y afrontar las luces de la ciudad de un modo diferente pero siempre creativo y muy divertido.
En resumen, un gran taller, que repetiremos en Bilbao el día 3 de junio de este año y que espero que sea tan divertido y lleno de fotógrafos fantásticos como el de este mes de enero.
Todas las fotografías de este artículo se tomaron con una Fujifilm X-T3 y mi querido y fiel Fujinon 23mm f2 WR.